¿Cómo debería ser tu currículum vitae?

Consejos de Carlos Montalvo, Partner de Villarroel & Hunter, recogidos en Linkedin.

De todos los currículums que recibo cada día, solo unos pocos son excelentes. Y muchos, justo lo contrario. ¡Tu cv tiene que estar a tu altura! Y pocas claves producen un gran salto de calidad.

En mi opinión, ¿Cómo debe ser un buen cv?

1. Tiene que tener VERDAD. La honestidad es un must, y está bien recordarlo. Porque veo a menudo cvs inflados como globos, que se pinchan fácilmente en la entrevista o en la toma de referencias. Cuando se detecta, ese candidato queda excluido no ya para ese proceso sino para cualquiera. Muestra lo que has hecho, no lo que te gustaría haber hecho.

2. Tiene que estar bien ordenado. Parece obvio, pero a menudo no es así. Un buen cv debería tener una introducción rápida al candidato, un recorrido por lo esencial de su carrera, no más de diez/doce años como norma empezando por la experiencia actual. Lo anterior “viene del maligno” y puedes resumirlo en apenas una línea. Lo que hicimos cuando íbamos en pantalón corto hoy tiene menos importancia. ¿Y que es lo esencial de nuestra trayectoria? La empresa, las funciones del puesto, la responsabilidad objetiva y los logros concretos. Idealmente cuantificables.

3. Tiene que ser corto. Mejor una página. Si acaso dos. Pongo a menudo este ejemplo. Un cv tiene que evocar, no mostrarlo todo. Tiene que enseñar lo suficiente, y enseñarlo bien, para que quien lo reciba se interese por nosotros. Es como cuando visitamos a alguien y, al entreabrir la puerta, lo que vemos, minúsculo, nos crea una expectativa de cómo será el resto de la casa. Pues aquí lo mismo.

4. Tiene que ser entendible. Cuidado con los palabros, la jerga o los acrónimos. Porque a veces no nos damos cuenta de que los títulos, los indicadores, etc que tienen significado para una empresa en concreto, carecen de él por completo para el resto de los mortales. Todo en cristiano, por favor.

5. Debe ser bonito. Ni “soviético” ni psicodélico. Limpio, agradable a la vista, con un look profesional. Con un buen balance de fondo y forma. Porque una persona limpia con una camisa con manchas… y el cv es nuestra carta de presentación.

6. Tiene que evitar lo superfluo. Despista de lo importante. Está muy de moda aquello de las competencias. El problema es que cada uno pone las suyas, no siempre relevantes, y evaluadas bajo qué criterio?… Eso sí, formación, conocimientos específicos, idiomas o reconocimientos, etc. siempre bienvenidos.

7. Hasta aquí para el notable. El sobresaliente lo tienen aquellos que, además, tienen alma. Esos cvs que los lees y puedes imaginar al candidato que tendrás delante, no sólo como profesional sino como persona. Esa persona y no otra. Que le mueve, que le importa, que le gusta, quien es. Sabes que verás a una persona madura, segura de sí misma y que se conoce bien. Y eso es mucho!

Tu cv tiene que hablar de tí y de tu historia. Si vale para cualquiera, no cuenta nada, o cuenta un cuento, deberías darle una vuelta. Espero que estas recomendaciones sirvan de ayuda.